La falta de comunicación, de expectativas y de visión a largo plazo, son los principales factores que provocan que más del 50% de las empresas familiares no logren llegar a la siguiente generación.
El hecho no sólo afecta a las empresas, también repercute en la economía mexicana, que mayoritariamente está conformada por negocios familiares, principal fuente de ingresos, empleos, innovación y riqueza del país, al representar aproximadamente el 90% del Producto Interno Bruto (PIB) y de las unidades productivas en México, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).